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jueves, 12 de julio de 2018

"Silencio perfecto".

He buscado el silencio perfecto desde que supe que era algo que, en teoría, existía: un silencio irrompible.
Lo he buscado en el corazón del bosque, y también bajo el agua.
Lo he buscado en la ciudad, en el concierto más ruidoso, pensando que quizás aparecería si usaba la psicología inversa.
Lo he buscado durante el día, y sobre todo durante la noche.
Sin éxito.
Porque siempre había algo que lo rompía, como mi respiración, mis latidos, o mis propios pensamientos, que sonaban más altos que las bocinas de los taxis de Nueva York.
He buscado el silencio perfecto desde que supe que era algo que, en teoría, existía: un silencio irrompible.
Pero ahora... Ahora lo busco esperando que tu voz lo rompa y tus palabras hagan desaparecer tu ausencia.
Esperando que, como cada noche, me llames para preguntarme qué tal ha ido el día.
Esperando descubrir que no te has ido, y que aún puedo abrazarte, y decirte un millón de veces que te quiero.
Esperando que no sea verdad que ahora sólo puedo echarte de menos.

miércoles, 18 de abril de 2018

"Descansa."

Te pido que te marches, porque estoy siendo egoísta, y tenerte así me parece mucho mejor que no tenerte... Y tú, después de todo lo que has hecho durante veintiséis años por mí, por todos, no mereces que sea egoísta contigo.
Te pido que te marches, porque estoy siendo cobarde, y no quiero tener que echarte de menos, no quiero simplemente recordarte... Yo quiero seguir viviéndote, pero no puede ser.
Te pido que te marches, porque no quiero pasar más tiempo a los pies de tu cama viendo cómo te apagas lentamente, tan lentamente que parece que no, pero sí.
Y me mata la espera, y me mata pensar que no voy a volver a verte si te vas. Me escuecen las lágrimas en los ojos como si fueran ácido, pero me las aguanto dentro como si fueran diamantes e intento hacerme la fuerte aunque me pueda la desesperación; se me encoge el estómago por las náuseas, pero siento también el hambre de quien lleva a pan y agua una semana, mi propio cuerpo rebelándose por la ansiedad.
Vete ya.
No te vayas nunca.
Vete ya, sí.
Pero, por favor, no me dejes nunca.